Imagina que dentro de ti hay un río dinámico, una corriente de energía que debería correr libre, llevando vida, pasión y propósito a cada rincón de tu ser.
Pero, ¿qué pasa cuando ese río encuentra bloqueos? ¿Cuando el agua se estanca y la corriente pierde fuerza?
¡Ahí está tu oportunidad! Sí, la oportunidad de abrir las compuertas, de limpiar el cauce y permitir que la energía vuelva a fluir en todo su esplendor.
¿Qué te Detiene?
Haz una pausa. Mira hacia adentro. Escucha el murmullo de tus pensamientos y emociones. ¿Qué está bloqueando el flujo? ¿Miedos que te susurran al oído? ¿Mentiras que te has contado para sentirte seguro?
No te preocupes, no estás solo. Todos llevamos sombras dentro. La clave no es huir de ellas, sino enfrentarlas. Reconocerlas. Aceptarlas. Porque en esa aceptación comienza el verdadero cambio.
Desenmascara tus Mentiras
¿Qué historias te has contado sobre ti mismo? Que no eres lo suficientemente bueno, que no mereces lo que deseas, que necesitas ser de una forma específica para ser aceptado.
¡Basta! Es hora de derribar esas fachadas y abrazar tu verdad. Deja de lado las máscaras que llevas para complacer a otros.
Sé tú, en toda tu autenticidad. Y cuando lo hagas, sentirás cómo el río empieza a fluir de nuevo, esta vez con más fuerza y claridad que nunca.
Transforma tu Dolor
¿Y el dolor? Sí, ese que llevas en lo más profundo, el que a veces ni quieres mirar. No lo encierres más. Déjalo salir. Déjalo fluir. Porque cuando lo liberas, abres espacio para algo mucho más poderoso: el amor.
El amor no es solo una palabra bonita; es energía pura. Está ahí, dentro de ti, esperando que le des permiso para llenar cada rincón de tu ser, para transformar cada herida en una cicatriz que cuenta una historia de superación.
Libérate de la Culpa y el Miedo
La culpa y el miedo son dos maestros duros, pero necesarios. No los ignores; míralos de frente. Reconoce lo que te enseñaron, pero no permitas que definan tu presente.
Perdónate. No importa lo que pasó, no importa cuántas veces sientas que fallaste. El pasado es solo un eco, y cada día tienes la oportunidad de empezar de nuevo.
Fluir es Sanar
Cuando te permites liberar los bloqueos, algo mágico sucede: tu energía vuelve a fluir. Como un río que encuentra su curso, todo en tu vida comienza a alinearse.
Tu vitalidad se renueva. Tu mente se despeja. Y tu conexión contigo mismo –y con el mundo– se hace más profunda.
La Vida te Llama
Así que, ¿qué estás esperando? No hay mejor momento que ahora para soltar, para liberar, para transformar. Rompe tus barreras. Permite que la corriente de tu energía recorra tu ser con fuerza, con propósito, con autenticidad.
Es tu vida, tu danza, tu río. Y mereces que fluya en toda su magnificencia.
(Montse y Javi de Serena Tu Mente)
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